¿Cuál es la historia detrás de las pinturas en la estación Historic Broadway?

La exhibición se encuentra en la nueva estación Historic Broadway de Metro. / Foto: LA Metro.

Cuando el artista Ralph Gilbert se enteró que había sido seleccionado para plasmar su arte en una de las estaciones de Metro, sintió emoción, pero también una gran responsabilidad. Buscaba crear algo que los pasajeros no solo reconocieran, sino que también relacionaran con su propio mundo y lo logró.

Su obra Actuación en las calles de LA (Performance on the Streets of LA), ubicada en la nueva estación Historic Broadway que se inauguró hace poco en el Conector Regional de Metro en el centro de la ciudad, conecta con los viajeros, pero también resalta la cultura y lugares especiales para la comunidad latina.

“Pensé en pintar sobre los espectáculos callejeros porque, aunque son interesantes, muchas veces pasan desapercibidos… Tienes a Los Ángeles, una ciudad que es el centro del entretenimiento por sus películas, pero no es todo lo que pasa aquí. Existe también un grupo de personas talentosas en las calles que forman parte de esta ciudad pero que se les otorga poco crédito por lo que hacen”, expresa Gilbert.

Con ese tema en mente, lo siguiente era: ¿cómo crear la conexión con el transporte y los pasajeros?

El artista Ralph Gilbert. / Foto: LA Metro.

La pieza forma parte del Lightbox Program de Metro Art, donde las pinturas a gran escala se instalan dentro de cajas de luz de 5 por 7 pies de altura. Al artista se le ocurrió pensar en cada caja como si fuera la ventana de un tren, para que el pasajero tenga la impresión de visitar diversos lugares durante su viaje. Para este proyecto eligió cinco en particular: Pershing Square, Echo Park Lake, Placita Olvera, el bulevar de Hollywood y el paseo de Venice.

“Quería que vieras desde esa ventana algo reconocible del lugar, pero con personas actuando que te cautiven con su talento… Por eso fue importante darle esta sensación de movimiento a los personajes”, explica Gilbert, de 75 años y quien agrega que mostrar diversidad en este proyecto fue algo muy importante para él.

Para ello, dejó su casa en Atlanta y en 2022 voló de regreso a Los Ángeles, la ciudad donde nació y vivió por 30 años. Aunque los recuerdos de esta gran metrópolis revoloteaban en su memoria, Gilbert hizo su trabajo de campo y visitó de nuevo -de lunes a viernes y fines de semana- cada uno de los cinco lugares elegidos. Tomó fotos, dibujó bocetos y paseó. Volvió a Los Ángeles no solo a ver qué había cambiado y qué era representativo de cada sitio elegido, sino que también observó esos cinco mini mundos por horas para poder captar la esencia del lugar y de su gente.

El primer cuadro de la obra es Pershing Square. Es fácil de identificar porque tiene pintada su característica y enorme torre. Además, tiene como personajes principales, un grupo latino dando un espectáculo en vivo.

A la derecha está Echo Park, representado por el lago y que es un vecindario especial para el artista porque fue el primer lugar donde vivió hasta su etapa escolar. “Recuerdo que iba mucho al lago cuando era niño. En aquella época si ibas a pescar, podías agarrar pececitos azules y todavía había botes de madera a motor”, dice Gilbert.

La pintura central se enfoca en la Placita Olvera, un lugar donde los padres de Gilbert lo llevaban a pasear cuando era niño. La pieza muestra diversos elementos de la cultura mexicana, como la cara de dos personajes pintadas de calavera por el Día de los Muertos, el baile con la vestimenta típica y un hombre que toca la flauta -algo muy típico de los eventos que se celebran durante los fines de semana en el lugar.

En las pinturas resalta el azul cobalto, el verde limón y el rojo escarlata para darle vida a las imágenes. / Foto: Mey Lyn Mitteenn.

Si en el siguiente cuadro ves estrellas, un Oscar, actuaciones en la calle y un hombre tocando la “batería” sobre cubetas, sabrás de inmediato que se trata del bulevar Hollywood. Como dato curioso, Gilbert revela que el personaje dorado del centro es él mismo. “Cuando mi esposa lo vio por primera vez me dijo: “te ves muy mayor como para ser un artista de la calle”. Así que tuve que cambiarlo a una versión más joven de mí”. Agrega que decidió incluirse en el cuadro porque es algo que hacen algunos artistas cuando pintan obras públicas importantes. “Es una tradición que viene desde el Renacimiento, cuando Rafael se pintó a sí mismo en el mural que hizo en el Vaticano”, comenta.

Finalmente, está el paseo de Venice representada por un bailarín afroamericano y una mujer en patineta, que es la figura central. Para poder representar a la comunidad y tener diversidad, Gilbert dice que, si bien una parte tiene que ver con la etnia, la otra parte importante es el género. “No es muy común ver a mujeres actuando en la calle, pero si vas a ver gente patinar, hay muchas. Y no lo hacen tanto por tener audiencia sino más bien por pura diversión”, dice el artista.

Aunque el proceso de selección, pintado y exhibición tomó su tiempo, Gilbert está contento de haber producido algo que es hoy parte de Los Ángeles -una ciudad que aún siente como su casa. “Fue un placer formar parte de un proyecto como el Conector Regional que va a ser usado por miles de personas y que yo he podido hacer algo que forme parte de su experiencia”.

El transporte público no ha sido ajeno a Gilbert, quien hace años solía tomar el autobús para ir a clases de música a la Universidad del Sur de California (USC). “Aunque llevo décadas en Atlanta, Los Ángeles es una parte importante en mi vida. Cuando creces en un determinado lugar, es como si se te tatuara en el alma”.

Puedes encontrar la versión en inglés de esta historia aquí.